La osteopatía es una técnica manual que se centra en la identificación y corrección de alteraciones del organismo. Su base holística parte de la concepción del cuerpo humano como un todo interconectado, de modo que una disfunción en una zona puede afectar a la función de otras zonas.
Mediante técnicas manuales generales (TGO) y específicas (TEO), la osteopatía promueve la movilidad, la circulación y el equilibrio del organismo para que las diferentes estructuras del cuerpo puedan autorregularse y sanarse.
DIFERENTES TIPOS DE OSTEOPATÍA
Las técnicas osteopáticas inciden sobre diferentes conjuntos de tejidos, por lo que estas terapias manuales se dividen en tres grandes grupos:
- Osteopatía estructural, que se enfoca en el sistema músculo-esquelético.
- Osteopatía visceral, que actúa sobre los tejidos que participan en las funciones de las vísceras.
- Osteopatía craneal, que facilita la micromovilidad del cráneo y la región craneosacral a través de las membranas meníngeas.
Tras una evaluación completa de la persona, el osteópata identifica las disfunciones estructurales y funcionales del cuerpo para corregirlas mediante la técnica adecuada en cada caso.
¿Cuándo se emplea la osteopatía integral? Lo vemos a continuación.
OSTEOPATÍA INTEGRAL: ¿QUÉ ES Y CUÁNDO SE EMPLEA?
La osteopatía se utiliza en una amplia variedad de alteraciones, sobre todo para aportar un enfoque preventivo que permita mejorar la salud y el bienestar general. Por tanto, se pueden usar técnicas estructurales y funcionales para abordar tanto aspectos relacionados con tejidos blandos como los relacionados con la musculatura y la tensión miofascial.
Así pues, se pueden emplear técnicas combinadas, es decir, Osteopatía integral, para ayudar al cuerpo a recuperar su equilibrio. Este método no está limitado a un determinado grupo de personas, sino que es apto para mujeres embarazadas, personas mayores, bebés y deportistas, entre otros.
La Osteopatía integral está especialmente indicada como una técnica preventiva, si bien también contribuye a regular los desequilibrios del organismo cuando ya se han producido.
En nuestra clínica de osteopatía en Madrid consideramos el cuerpo como un todo, por lo que acudir a una revisión mensual o rutinaria de osteopatía integral es una buena manera de mantener el correcto funcionamiento de todo el organismo.
Conviene destacar que no es necesario esperar a que nos duela algo para acudir a una sesión de osteopatía. Aunque el origen de la primera sesión haya estado en un episodio de dolor agudo, en la espalda, por ejemplo, las revisiones periódicas ayudan a prevenir la aparición de nuevas molestias en la misma zona o en otras.
Si quieres mantener el equilibrio y bienestar de tu cuerpo, recuerda que la osteopatía integral periódica te puede ayudar. Pide cita en nuestra clínica de osteopatía en Madrid y resolveremos todas tus dudas.
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